Pymes en Línea lo llevó a tomar un máster en marketing digital
Patricio Rivera Cabezas casi por casualidad llegó a la plataforma Pymes en Línea de Corfo, instancia que le permitió “abrir los ojos” para seguir digitalizándose al punto que inició un máster online de marketing digital.
“Aproveché el tiempo al máximo y comencé a hacer realidad mi sueño que es construir sitios web con este máster”, comentó al recomendar el uso de la plataforma que te lleva a la digitalización: www.pymesenlinea.cl
“Los invito a que se motiven ingresando a Pymes en Línea, son cursos gratis y 100% prácticos. Las exposiciones te abren los ojos”, recalcó.
CESANTE
Este ingeniero comercial, ariqueño de 44 años, casado y un hijo, en abril quedó cesante producto de la pandemia. Con mucho tiempo libre, empezó a navegar por internet y un día se encontró con Pymes en Línea, le interesó y participó de una charla online de “marketplace”. Y tras la tercera charla, se dio cuenta que en la misma plataforma habían muchos cursos interesantes, así que ingresó.
Uno de los aspectos que destaca de la plataforma es lo práctico de los cursos. “Las clases son ‘modulo y prueba’, es decir, son 100% prácticas. Los especialistas te enseñan los conceptos y luego pones a prueba lo aprendido. Los cursos que he realizado son súper fácil de entender, bien explicados y muy dinámicos”.
Agregó que gracias a los cursos se motivó a estudiar otros, pero de mayor duración. “Por ejemplo hice el curso de introducción al marketing digital, después en Sence hice el curso de Mercadotecnia Digital (terminé el martes 11) y ahora empecé a realizar un Master de Marketing Digital, que tiene una duración de 6 meses”.
Patricio tiene claro que “no sólo es aprender por aprender algo nuevo”, porque ya está proyectando los conocimientos adquiridos: “Me dará un plus para asesorar a empresas, algo que he realizado gran parte de mi carrera laboral”, comentó.
Ya está dando algunas asesorías de cómo aumentar las ventas en la botillería de su madre; mejorar la clientela del salón de belleza de su esposa; y a amigos que venden desde empanadas hasta comida china, entre otros. “Estoy dándole la vuelta a cómo transformar estos negocios físicos en virtuales, porque debo pensar en mi reinvención cuando pase todo esto de la pandemia”.